martes, enero 09, 2007

Mondo Jicho

Hemos vuelto de las vacaciones navideñas. Ahora nos queda la cuesta, las rebajas y pintar la casa de una vez por todas.


Lo dicho, mi relación con el mundo Jicho siempre ha sido muy cercana. Nací en un barrio lleno de tanos, crecí y estudie en otro barrio lleno siempre de gitanos. Mis padres se mudaron a un barrio donde no había nada, salvo casas viejas con muchos calós dentro y últimamente he currado (atención!) con un gitano. Ya no curra con nosotros, y todo el mundo decía que era un gitano apayao, pero lo curioso del tema es que era gogó o danzante nocturno en discotecas y siempre que lo veía cambiarse de ropa usaba tanga.

No me veo usando tanga, pero aun menos currando donde curro.

Estudíe en un colegio de curas y allí conocí a los únicos gitanos gemelos que he visto en mi vida. El Golo y el fete, los hermanos Gabarre. Solo fueron un año, como Dios o la Ley gitana manda, y ese año, como podéis imaginar, me hice amigo de ellos.

Los curas daban almuerzo a los pobres, chocofetem (1) y pan. Nosotros íbamos a pedir también el desayuno / almuerzo y nos lo daban, pero estoy seguro que de haber ido yo solo me hubiesen dicho que canapé. Enseguida pillé confianza con ellos, contándome que a su padre lo tenían en el gurifáno (2) más que en casa. Con los años los he ido viendo muy a menudo, uno de ellos de negro viudo y el otro siempre me dice que está buscando trabajo.

Cuando no pasaba los diez años nos fuimos a vivir a un barrio que todos consideraban la ciudad sin ley, yo no lo veo así y mas ahora que se ha convertido en lo mas pijin de poca monta de toda mi ciudad. Ya conté que en alguna ocasión toreamos cochinos en los corrales que tenían los gitanos en frente de mi casa y que más de una vez también me topé con animales (vivos) en la escalera de mi edificio.

Ya de muy crío yo veía como los señores gitanos le pegaban al pegamento, hoy en día ya no se ve. También recuerdo la escena de vr como dos gitanillos se tiraban de la cola en pleno invierno por un trozo de roscón, empujados por una vecina que por lo visto le hacía gracia. Ahora para ser un gitano como dios manda tienes que llevar colorao (3) , haced uso de tus chuquelas (4) y tener un buen grupo de descafeinados al lado tuyo. Esa es una cosa bastante importante, llevar a tus esbirros cerca de ti, que te vigilen el coche cuando entras al bar o que te hagan los canutos. Hace ya tiempo, sentados en el lugar donde nos sentábamos siempre, aparecieron dos chinorris a pedir hachis para el Kúng fu (vedse bien donde se tilda)..

- Hazme una posturica.

- ¿De cuanto?

- De mil duros, co. Pero házmela bien que es para el Kúng fu.

Y claro, tenías que hacerla de puta madre porque el tal Kúng fu era el típico gitano que de crío se tragaba todas las pelis de artes marciales y que de mayor daba unos trujos de campeonato. Jugando al fútbol con él sabías que si él decía que era falta sin duda lo era y si no lo era lo mismo te daba, era falta y punto.

Vivía encima de unos gitanos, al lado había un bloque con otra familia de gitanos, con varias hijas. Vendían ropa en el barrio y una de ellas, bueno, una de ellas era guapísima. Mi madre un día bajó a comprarme unos pantalones. La moza le dijo a mi madre que si no me valían podía bajar yo a cambiarlos, que el txemita estaba muy bueno (mentira). Supongo que lo diría para hacerse la maja y tal, pero aun con esas la tentación no era tentación entre otras cosas porque a su hermano le llamaban Steven Seagal, un armario de 1’90 también ducho en las artes marciales y que tenía un doberman asesino.

Hay miles de historias con los gitanos de mi barrio. Recuerdo un día que estábamos sentados bajo el techo del porche de mi casa cuando aparecieron los de siempre, en banda claro, mi hermano y mis colegas salieron por patas y yo por mis cojones me quedé allí. Me pidieron que les diese las lupas (5) contestándole yo que lo llevaba beige. El pavo se puso furo, obviamente iba con sus esbirrillos, pero chico, las gafas son sagradas, así que ni de coña se las di.

El ayuntamiento quería hacerles pisos cerca de donde vivían mis viejos y recuerdo que durante un verano se montó una buena trifulca con la policia. Manifestaciones, pelotas de goma, botes de humo…y es que es normal, tantos años aguantando viento y mareas para que luego pongan a esa chusma (porque eran chusma, las cosas como son) a dos metros de nuestras casas, en unos adosados de puta madre donde en teoría iba un hospital.

Ahora vivo en otro barrio, también plagado de gitanos, y realmente puedo decir que no me considero una persona racista, pero me cansa ver el mamoneo que se llevan y lo bien que saben sacar partido de los payos.

Los racistas somos nosotros.

(1) Chocofetem : chocolate

(2) Gurifáno: Quirófano

(3) Colorao : Oro

(4) Chuquelas: Dinero, perras. Mas. Perro (chuquel) dim. Perritas. Aragonesismo perricas.

(5) Lupas: Gafas.


Band of light.- The Archer (1974)












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Ramatam - Ramatam (1972)

Impresionante banda de Hard rock nada cañero, con mucha sección de viento y hierros. Muy, pero que muy recomendable.













contraseña: 6070rock

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